ESPEJO DE HUMO
Con la desnudez
con que el universo se mira a sí mismo
aquella noche un ángel
se arrancó las alas,
nubes rojas sintieron
gotas de plumas derramada.
Caer de solidas alturas,
tú que floreciste
en el resplandor de cada horizonte,
consciente de mirar a los ojos
celeste del aire, y no ver nada,
te transformas en espejo de humo
y abandonas tu cuerpo
frente a mi memoria.
Pintura de Tamara de Lempicka–the polish girl